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NOVENA A LA VIRGEN DE LA VEGA

 

NOVENA  A  LA  VIRGEN DE LA VEGA

Por la señal de la Santa Cruz:

    ORACION:
Vedme aquí, i0h mi amado y buen Jesús! Que pegado con el polvo, confuso por la gravedad de mis pecados, arrepentido de veras y con propósito serio de no volver a ofenderos, me postro ante el trono de vuestra clemencia, y os tributo las más expresivas gracias por los beneficios que me habéis dispensado
siempre, y por las que espero conseguir en la presente novena. En todo tiempo os habéis dignado consolarme con la abundancia de vuestra misericordia;

i0jala supiese significar mi reconocimiento con provecho de mi alma y de un modo correspondiente a vuestra grandeza excelsa! Se, amabilísimo Jesús, que al mostrar a un siervo vuestra gloria le habéis dicho estas palabras de consuelo y de ternura:

"Yo soy amoroso entrañablemente, compasivo, sufrido y de mucha espera, grande en el perdón, fiel y leal en la palabra y que extiendo mis bienes por mil generaciones de hombres".

No han sido empero los Moisés, los Divides y los Pablos los que mes han experimentado las misericordias de los cielos.

Yo lo soy y lo confieso humillado a tus sagradas plantas al dirigirme a Vos y a vuestra Madre amantísima por medio de este devoto novenario. A Vos Señor, tan interesado en mi salud acudo para que deis firmeza a mis propósitos, robustez a mi caridad, calma a mi espíritu, y perseverancia en vuestro servicio hasta la muerte.

Por mi parte, expresaren mis labios el regocijo de mi espíritu cantando vuestras alabanzas y publicando, de generación en generación, vuestra clemencia conmigo.

Dignaos ponerme a cubierto en el día de los males en lo escondido de vuestro tabernáculo divino.

iOh! Cuando llegare el día en que sacrificaré en él  hostias de paz con voz de salmo y júbilo.

¡Oh Dios Mío! A ti el silencio es la mejor alabanza en Sión, y a Ti mi alma agradecida pagará sus votos en Jerusalén.

Amén.

ORACIÓN

Dulcísima Reina y Madre mía, postrada ante el trono de vuestra devota imagen, bajo el titulo de la Vega, protesto con la efusión mastierna de mi corazón, que sois aquella criatura privilegiada, que tiene en sus manos la omnipotencia del Padre, la misericordia del Hijo y el inmenso amor del Espíritu Santo. Venturoso el pueblo que sepa según tus méritos darte el honor y la alabanza.

i0jala! pudiese yo hacer ostensible a toda gente con el doctor de la gracia, el incomparable Agustino, que nadie, nadie que haya acudido a tus entrañas de amor ha sido desamparado. Vuestros cariños Madre mía, me han inundado de alegría en todo tiempo y siempre encontré placer en tu protección y en tu clemencia.

Ante tu altar de refugio, ante cualquier estampita de Vos, eminentísima María, os invocare como a Madre de mi Salvador y Madre de mi salud; derramare mi corazón y lo pondré todo entero en vuestras manos divinas, con ciencia cierta, de que debo fiarme mas de Vos que de mi mismo.

iAh Señora!, una experiencia gloriosa me tiene consignada esta verdad y por eso me impulsan los afectos de mi alma agradecida a quererte, bendecirte y alabarte.

Bendita seas, porque en mis amarguras me concediste el consuelo, en mis penas sufrimiento, en mis trabajos alivio, en mi enfermedad virtud; bendita seas en mi alma eternamente.

Continuad Madre mía dispensándome vuestra protección y en lo que especialmente pido en esta santa novena imploro tu poder de todas veras, reclamo tu amor con interés y espero con confianza tus misericordias: es en este mundo mi Única esperanza vuestro amantísimo Jesús y después de Jesús lo sois Vos. iOh Madre mía!. Amen.

 

 

ORACIÓN FINAL

iOh Virgen de Ia Vega, que superas toda alabanza! Todo lo que tu quieres lo superas ante Dios, de quien eres Madre; y aun cuando nosotros somos pecadores, tu eres dulce Madre del Redentor y dulce Madre nuestra, y puedes abogar por tus hijos pequeños y pecadores ante tu Hijo Altísimo y Redentor; a tu nombre se abren las puertas del Cielo; en tus manos estén todos los tesoros de Iadivina misericordia; óyenos, iOh! placida Virgen de la Vega y Madre, y si nos conviene, concédenos las gracias que te pedimos en esta novena. Amen.

 

ORACION DE SAN BERNARDO

 

Día Primero:

ORACION

iOh Virgen de la Vega! Madre tierna de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque sublimada sobre el coro de los Ángeles por el mérito incomparable de tu eminente pureza, no te has olvidado de atender a mis miserias desde el trono de tu inmensa gloria. Has sido para mi, más generosa que Rebeca para su Jacob querido y te es deudora mi alma de más sublimes obsequios.

¡Qué de veces ha estado en peligro mi inocencia, cuantas a punto de perecer mi virtud! Si no hubiera sido por tu devoción interesante me hubiese perdido eternamente; y si en tiempos en que mis excesos me alejaban de Ti, Madre amantísima, aun me mostrabas el amor de tus entrañas clementes.

Como en estos días que me dedico todo a bendecir tus virtudes y a celebrar tu clemencia podrás desoír mis clamores y mis suplicas? Si hasta ahora debo atribuir a tu poderosa intersección el que Dios no me haya castigado según exigían mis pecados, hoy y en los días sucesivos voy a interesar más tu patrocinio amoroso, suplicándote de veras me alcances, de tu dulcísimo Jesús, el perdón de mis pecados, la enmienda de vida y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor de mi alma. Amén.

Petición. Reza tres Avemarías.

 

 Día Segundo:

ORACION


iOh Virgen de Ia Vega! Madre dulce  de los pecadores, bendita seas mil veces porque aunque ensalzada sobre los Ángeles por tu mayor lleno de gracia, no te desentiendes de mis necesidades y trabajos, y me acoges con singular benignidad, a pesar de mi baja ingratituden el
anchuroso seno de tu protección: Más hermosa incomparablemente que Raquel, por el inmenso cúmulo
de santidad, con que estuvo enriquecida tu alma benditísima, eres en efecto, después de tu Jesús
Sacratísimo la criatura más bella, la más acabada, y más perfecta que forme, el dedo omnipotente del Eterno. En Ti están depositadas sus misericordias, y mi ferviente devoción a mi Madre clementísima, será el conducto, por donde recibiréinfaliblemente sus divinas bendiciones; así lo siento, porque siendo Madre de Dios, tienes en tus manos los tesoros de su omnipotencia, de su gracia, y de su misericordia, y no puede desairar Jesús jamás a una Madre que le dio sus pechos, le guardó, le alimentó, le educó, le acompañó a la Cruz y hasta el sepulcro; interesados pues iOh piadosísima María!, para que me conceda aumento de gracia, progreso en la virtud y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra  y bien  de mi alma. Amén.

          Petición: Reza tres Avemarías.

 

Dia Tercero:

 

ORACIÓN

iOh Virgen de la Vega! Madre amable de los pecadores, bendita seas mil veces porque aunque elevada sobre las Virtudes por el superior fervor de tus acciones santas te ocupas incesantemente y te interesas mucho hasta de las pequeñas mías, si se emplean en el servicio del Señor, y en vuestro culto.

Con más solicitud que Ruth has cuidado de mi salud espiritual, y has recogido mis pocos méritos de virtud, y penitencia, dándoles el fomento necesario para conseguir el cielo.

iQué copiosamente has remunerado cualquier obsequio que te ha dirigidomi ingrato corazón!.

Desde este día to lo ofrezco todo sin reserva alguna, todo es vuestro, Madre mía, porque si lo vuestro es mío, justo es, que lo mío lo sea siempre de mi Madre benignísima.

No más inconstancia en la virtud, no más afición at mundo, no mas gusto en el pecado, es absolutamente imposible querer pecar y tenerte devoción.

Robusteced mispropósitos yalcanzadme de vuestro Hijo Jesús gracia para superar las tentaciones, preservación de nuevas caídas, y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amen.

     Petición: Reza tres Avemarías.

 

Día Cuarto:
ORACION


iOh Virgen de la Vega! Madre suave de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque honrada sobre el trono de los Principados por excederles en prontitud para ejercer los ministerios divinos, lejos de desoír mis suspiros y clamores, a Ia sola invocación de tu nombre sacratísimo, me has prestado el oportuno socorro. Me has colmado de regalos, prudente Abigail, y separándome de los senderos de la perdición, tienes comprometido mi corazón a engrandecer tu sabiduría, perpetuar en el tu santo nombre, y trasmitir sus dulzuras a toda generación; Tu presides en los consejos acertados de los grandes, Tú inspiras los pensamientos eruditos de los sabios, Tú proteges las causas perdidas de los pobres; ¿Y se perderá la de mi eterna salvación?. No basta haber sido santo e inocente una vez para salvarse, es preciso Iacontinuaciónhasta la muerte, pero estoy seguro, de que si persevero en vuestra amistad y devoción verdadera hasta ese término, tengo un evidente signo de ser predestinado para el cielo; concededme aquella gracia, iMadremía!, y alcanzadme de vuestro Hijo benditísimo una confianza viva de unirme al número pequeño de los escogidos y lo que en esta novenaespecialmente pido si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amén.

    Petición: Reza tres Avemarías 

Día quinto:

ORACIÓN

 

iOh Virgen de Ia Vega! Madre amante de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque levantada sobre el coro de las Potestades por tu mayor perfección en Ia virtud, no rehúyes el mirar las tribulaciones de tus pobres hijos, y ser el instrumento feliz de su consolación, y de su dicha: más agraciada y pura que IaSunamitis, parece que no tienes otro encargo en el palacio de Dios, que velar sobre mi alma, y cuidar con interés del único negocio de mi salvación eterna. Leche suave me ha sido siempre tu palabra cuando la he empeñado para  calmar mi conciencia, luz del Cielo tus inspiraciones para dar eficacia a mi virtud, y tus labios han destilado sobre mi afligido corazón las imponderables suavidades de los consuelos divinos; con tu apoyo he fugado mis hábitos pecaminosos, he domado mis pasiones, he recobrado el fervor, he santificado mas mi vida.Continuad Madre míadispensándome vuestros favores y alcanzadme de vuestro Hijo benditísimo aumento de merecimientos y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amen

Petición.   Rezatres Avemarías.

 

Día sexto

ORACIÓN

iOh Virgen de la Vega! Madre clemente de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque encumbrada sobre las Dominaciones por más exacta en cumplir la voluntad del Señor, no suspendes nunca el influjo de tu dulce amor sobre sus hijos y de mí el más ingrato de todos.

Si a Susana propone la Sagrada Historia como proverbio de modestia, la eclesiástica por San Dionisio Areopagita admiró tanto la suya, que to hubiera tenido y venerado por Dios, si la Fe no la enseñara otra cosa la vida, la salud, el honor, la fama, la fortuna, dones son, que he conservado en méritos de to protección dulcísima, y a Ti debo,  ¡Madre mía! el que no haya caído en agonía mi fe, en desolación mi espíritu, en languidez mi conciencia, sin recurso se me hubiese disipado el corazón, oscurecido la mente, tumultuado el interior, y el exterior descompuesto si no hubiese sostenido mis resoluciones, y protegido la mudanza de mi vida; no retiréis de mi vuestra voz consoladora, y alcanzarme de vuestro Hijo benditísimo un reconocimiento verdadero a sus finezas obtenidas por vuestras hermosas manos, y lo que en esta novena especialmente pido si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amén.

   Petición: Reza tres Avemarías.

 

DíaSéptimo:

ORACION

 

  ¡Oh Virgen de la Vega! Madre noble de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque engrandecida sobre el coro de los Tronos por tu más estrecho enlace con el Creador, espontáneamente acudes a mis suspiros, y me confortas en mis padecimientos.

Más elegante que Judith, y cargada de riquezas de superior valía, no tienes otros deseos que henchir con ellas a tus siervos y domésticos, no permita el cielo, que sea omisa mi alma en honrar, invocar y procurarse el auxilio de tu poderosa intercesión, y el mostrar con obras buenas el

amor y gratitud que se to debe. No seré yo de aquellos devotos presumidos, que sirviéndose devuestra protección, como de un velo para cubrir sus desórdenes se prometen con ella una aparente seguridad en sus pecados, y prosiguen en ellos ofendiendo descaradamente a Jesucristo y a Vos. A efecto de reparar mi ingratitud y mi poca fidelidad en cumplir las palabras que tantas veces tengo reiteradas os consagro en este día todo mi afecto, respeto y amor.

Venero vuestra bondad ilimitada, y os reconozco por Madre de misericordia; esperanzado en esta os suplico me alcancéis de vuestro Hijo benditísimo firmeza y constancia enmispropósitos y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amen.

 

   Petición: Reza tres Avemarías. 

Día Octavo:

ORACION

 

iOh Virgen de la Vega! Madre pura de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque exaltada sobre el coro de los Querubines por el mérito de tu celestial sabiduría no to has dignado disipar las tinieblas de mi entendimiento, e ilustrarle con los rayos luminosos de la gracia de tu buen Jesús.

Antecedió me tu sabiduría en mis palabras y acciones; pero yo
ignoraba que era Madre de toda felicidad hasta que experimenté de firme la grandeza de tu amor, y la multitud de tus largos beneficios.

¿Quién, Esther graciosa, quien ha puesto en duda vuestra bondad con los mortales, vuestro indecible poder, vuestro eficaz valimiento?

iAh, impíos! Sepulte el polvo, y confunda para siempre esas doctrinas que tienden a despojar a mi Madre de los gloriosos títulos que mas la honran.

Yo he mirado to intercesión y favor como medio infalible para conseguir el cielo y protesto a voz en grito, que Vos en vuestra devota imagen de la Vega, me habéis sido una luz indeficiente en toda línea de bienes; os ofrezco en recompensa tributo de bendición y alabanza, y os aseguro que me gloriare toda mi vida de ser del número de vuestros siervos;aceptad mis sentimientos  yalcanzadme de vuestro Hijo benditísimo estabilidad en vuestrainteresante devoción y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amen

Petición: Reza tres Avemarías.

Día noveno:

ORACION

 

iOh Virgen de la Vega! Madre amable de los pecadores, bendita seas mil veces, porque aunque entronizada por tu intensa caridad sobre el coro de los Serafines, te insinúas amorosamente a mis instancias, y haces extensiva tu clemencia a las enfermedades y miserias de mi cuerpo.

Has excedido a aquella Maríalaboriosa que recomienda San Pablo por su piedad en socorrer a los fieles. Las ofertas que se hacen a tu imagen de la Vega, las limosnas que se recogen en el día de tu solemnidad, los exvotos que cubren las paredesde tu hermoso templo, como monumentos de gratitud perenne, no son sino destellos leves de tu corazónbenéfico.

    ¡Con que emoción se convierte el ciego a tu imagen devotísima, saludándote afectuosamente, porque consiguió el consuelo en su ceguera lastimosa!.

El sordo, el mudo, el paralitico, el moribundo, saludemos todos a Maríaporque acredito en nosotros ser Madre de la Vega.

¡Ah         Madre       amantísima! . Queobligados estamos a bendecirte toda la vida las dulzuras de tu Santo nombre. Eterna sea vuestra memoria en nuestras almas, y esta es la gracia que espero me alcancéis de vuestro JesúsDivino, y lo que en esta novena especialmente pido, si conviene para su mayor honra y bien de mi alma. Amen.

Petición: Reza tres Avemarías.

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